miércoles, noviembre 28, 2012

La justicia es aquello que los jueces sacan en los dados



El segundo experimento con jueces, animalillos, era este:

“Jueces alemanes con una media de más de cincuenta años de experiencia en los tribunales (¡) leyeron primero la descripción de una mujer que había sido sorprendida robando, luego echaron un par de dados que habían sido preparados para que los resultados fuesen un 3 o un 9.
Cuando los dados se detenían, se pidió a los jueces que sentenciaran a la mujer a una pena de prisión mayor o menor, en meses , que el número que mostraban los dados. Finalmente se pidió a los jueces que especificaran la pena exacta de prisión que impondrían a la ladrona. Los que habían sacado un 9 con los dados decidieron sentenciarla de media, a 8 meses, y los que sacaron un 3, a 5 meses; el efecto de anclaje fue del 50 por ciento."


Daniel Kahneman.

jueves, noviembre 22, 2012

La justicia es aquello que los jueces toman como desayuno


He leído hace poco, en dos libros de ciencia, varios experimentos con jueces (¿cuándo surgirá una asociación que pida la prohibición de experimentación con jueces?) que me han inquietado casi tanto como la reforma de la justicia de Gallardón.
El primero, sobre cómo influye la alimentación en los jueces. Sé lo mucho que influye en mi perro, y en los gatos del barrio, e incluso en algún amigo. Pero no sabía que los jueces eran tan sensibles a este tema. Reproduzco unos párrafos, que últimamente no reproduzco nada: 
“Un equipo de psicólogos, guiados por Jonathan Levav y Shai Danziger analizaron miles de decisiones tomadas en el curso de diez meses de juicios de una comisión que decidía sobre otorgación de la libertad condicional en una penitenciaría israelí.
De media, cada juez concedía la condicional solo a uno de cada tres detenidos, pero los investigadores descubrieron que las decisiones de todos los jueces seguían un esquema preciso. Los detenidos que comparecían por la mañana temprano obtenían la condicional el 65% de las veces, mientras que aquellos que comparecían hacia el término de la jornada la obtenían en menos del 10% de los casos.
Pero el paso de la mañana a la tarde no influía de forma regular, ya que en el curso de la jornada se producían otros eventos que influían en las decisiones. A mitad de la mañana, un poco después de las 10.30, la comisión hacía una pausa y los jueces tomaban un tentempié que reestablecía sus niveles de glucosa en sangre (aquí hay que recordar un estudio sobre niños que se habían saltado el desayuno y que comenzaban a comportarse bien tras comer algo a mitad de la mañana).
Los detenidos que comparecían un poco antes del tentempié de los jueces tenían sólo el 15% de probabilidades de obtener la condicional. Por el contrario, los que comparecían justo después del tentempié tenían cerca del 65% de probabilidades de obtener la condicional.
Y el mismo esquema se repetía con la comida."
Willpower”, Roy F. Baumeister y John Tiernye.

Mañana pongo el otro estudio, que no he desayunado bien y ando vago y con el juicio distorsionado. Pero hay una moraleja o algo parecido. Si te toca ir de juicio, aparte de procurar que no sea en España, mejor intentar un café y porras para todos...