viernes, noviembre 05, 2010

Del oficio de escribir


Sobre la escritura, dos extractos de artículos, uno de Vila-Matas y otro de Kenzaburo Oe:

"Creo que nadie lo ignora. Engañar al propio genio significa nuestra perdición. A las pobres almas falsamente amigas que quieren apartarnos de él habría que dejarles bien claro que uno va a seguir haciendo su voluntad. Y es que - como dicen Andrew Breen – si sucediera, por ejemplo, que para escribir uno necesitara de esa luz excelente que cae desde la izquierda, es inútil decirse que cualquier otra luz es buena. Uno ha de seguir su línea de fortuna y continuar atendiendo al potente lema, Haz tu voluntad, tan en sintonía con una casa siciliana…

 

 Kenzaburo Oe, en su artículo, habla de un libro de Duhamel dirigido a los jóvenes que aspiraban a formar parte del mundo literario: 

“Entonces, joven, vive la vida ante todo. Bebe abundante leche de la ubre de la vida para nutrir tus futuras creaciones. ¿Dices que quieres escribir buenas novelas? Hazme caso entonces y embárcate en algún puerto. Recorre el mundo ganándote el sustento con modestas ocupaciones, y soporta la pobreza. No te apresures a tomar la pluma. Sométete al dolor y al sufrimiento. Aprende con las miles de personas que encuentres a tu paso. Y cuando te doy estos consejos, quiero decir que jamás trates de esquivar la angustia que te ocasionen los demás o las adversidades que tengas que experimentar para hacerlos felices (…) ¿Quieres escribir buenas novelas? ¡Óyeme bien, entonces! Antes que nada, trata de olvidar ese deseo. Emprende un viaje sin pensar en un rumbo fijo. Agudiza la vista, el oído, el olfato y el apetito. Espera con el corazón abierto.

 

Esto último me inquieta. ¿Me hago marinero? ¿Me doy al sufrimiento?

1 comentario:

Julio dijo...

Date a las mujeres guapas, produce tanto placer como sufrimiento. ^_^